Restauración de escultura
La restauración de esculturas es una técnica que busca recuperar la belleza y el valor artístico de una obra escultórica que ha sufrido daños o ha decaído con el paso del tiempo.
- Obra tallada o modelada en diversos materiales: madera (roble, nogal, pino, y árboles frutales), piedra, alabastro, barro, metal, marfil. Esta puede estar policromada, dorada, con diferentes técnicas y materiales dependiendo de la época de ejecución.
Algunos de nuestros trabajos
Piedad XVII
El problema principal de esta talla fue que estuvo muchos años en una pequeña ermita que como puerta tenía una reja, de modo que las inclemencias del tiempo le afectaban de forma directa.
Esta obra consta de varias piezas sujetas entre sí con cola y clavos de forja. Por la parte de atrás está ahuecada.
Llegó toda repintada, y con ataque activo de xilófagos, carcoma.
Se eliminaron los repintes recuperando su policromía original, se le dio un tratamiento para acabar con la carcoma, masillado de las grietas que se habían abierto por los movimientos propios de la madera al secar. Finalmente se reintegró la capa de preparación y pictórica que faltaba y se le dio un barnizado de protección.
Como medida final y para que se mantenga en buenas condiciones fue trasladada a una ermita que reunía condiciones.
Santa Ana y La Virgen XVII
La talla llegó mutilada ya que sobre ella cayeron cascotes en los años 60 al caerse la torre de la iglesia en la que estaba. La cabeza de la Virgen estaba separada del cuerpo, también le faltaba el brazo derecho y el libro que compartía con su madre Santa Ana.
Se colocó la cabeza en su sitio, y en este caso, dado que existían fotografías de la talla antes de que se rompiera, pudo rehacerse el brazo de la Virgen y el librito.
Se consolidó el soporte, las capas de preparación y pictórica, se reintegró la capa de preparación y pictórica, y se acabó con un barnizado final de protección.
San Andrés XVII - XVIII
La talla tenía una abertura longitudinal en el rostro, faltaba capa de preparación y de policromía sobre todo en la parte posterior, a la peana le faltaba soporte y estaba repintada de color rosa. Toda la talla estaba oscurecida por los barnices oxidados.
Se masilló la grieta de la cara, se consolidó el soporte, las capas de preparación y pictórica, se reintegró la capa de preparación y pictórica, y se acabó con un barnizado final de protección.
San Ildefonso XVIII
Esta talla estaba toda repintada, tras eliminar dicho repinte se recuperó la policromía original que tenía estofado sobre pan de oro en los ropajes, y en las carnaciones matices más sutiles que el tosco repinte.
Se reintegraron las capas de preparación y pictórica de pequeñas lagunas , y se terminó con un barnizado de protección.
Virgen de los Desamparados XIII
Talla muy deteriorada porque durante muchos años estuvo en la hornacina a la intemperie en un edificio religioso.
Sufrió las inclemencias del tiempo, ataque de insectos xilófagos, carcoma, y fue recubierta de yeso.
Se consolidó lo que quedaba de soporte, y se recuperó la escasa policromía original que existía bajo la capa de yeso, que le fue dada en algún momento. Finalmente se le dio una capa de barnizado de protección.
No fue posible reintegrar los volúmenes perdidos ya que no existe documentación fotográfica de como era en origen.
Paje XVIII
La talla llegó con problemas de estabilidad, faltas de policromía en la copa y botella. Barniz oxidado.
Se devolvió estabilidad a la peana añadiendo la madera que faltaba, se reintegraron las capas de preparación y pictórica de pequeñas lagunas , y se terminó con un barnizado de protección.
Sede o banco presidencial XVII
Este banco policromado y con plata corlada, llego con problemas estructurales, desencajado y con carcoma. Además de faltarle policromía sobre todo en las patas. Todo el muy oscurecido por la oxidación de los barnices.
Se encajaron y encolaron las diferentes piezas ya que con el paso de los siglos la madera había secado y por tanto encogido.
Se consolidó el soporte, las capas de preparación y pictórica, se reintegró la capa de preparación y pictórica, y se acabó con un barnizado final de protección.
San Jorge Alanceando Al Dragón XVIII
En esta talla había problemas de desprendimientos de capas de preparación y pictórica en el cuerpo del caballo.
La espada metálica, regalo de algún feligrés, rozaba la policromía original. El pequeño relicario del pecho de San Jorge tenía el marquito deteriorado.
Se consolidó el soporte, las capas de preparación y pictórica, se reintegró la capa de preparación y pictórica, y se acabó con un barnizado final de protección.