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Restauración de Pasos de Semana Santa

Obras o "Pasos" esculpidos creados para recordar la Pasión y Muerte de Cristo.

Los pasos de Semana Santa son piezas únicas y muy importantes en la tradición cristiana, y su restauración es un trabajo que requiere un alto grado de precisión y cuidado para recuperar el esplendor de estas tallas de madera que representan escenas de la Pasión y Muerte de Cristo.
Nos encargamos de devolverles la belleza y el significado que tienen estas valiosas piezas de la tradición cristiana.
Como se trata de esculturas o grupos escultóricos, los  pasos a seguir son los mismos que en las esculturas, pero además teniendo en cuenta que la devoción que generan, hacen que aparezcan en ellos problemas de desgaste y pérdida de policromía por múltiples roces y besos. Y problemas de estabilidad en ocasiones por los movimientos que sufren en las procesiones.
En muchas ocasiones son los propios cofrades quienes en su afán por mejorar el aspecto de estas obras, hacen justamente lo contrario. Así hay repintes, y barnizados incluso con clara de huevo para dar brillo.
Los servicios que realizamos entorno a la restauración de Pasos de Semana Santa:
  • Nuestro servicio incluye la limpieza y consolidación de la madera, la reparación de cualquier daño o deterioro, la reintegración del color, si fuese necesario, y la aplicación de una capa de protección para evitar futuros daños.

Algunos de nuestros trabajos

Cristo atado a la columna XVI

La talla llegó con varias capas de barniz muy oxidado.

Se eliminó el barniz oxidado y se dio un barnizado final de protección.

Cruz XVII

En esta obra las tablas horizontal y vertical estaban desajustadas. Muy sucia y con barnices oxidados.

Se ajustaron ambas tablas, se eliminó barniz oxidado. Reintegrar las capas de preparación y pictórica y se dio un barnizado final de protección.

Paso El Encuentro, Quintín de Torre 1945

La obra llego con la pierna derecha de Jesús separada del resto, y todo el paso repintado.

Se acopló con espigas de madera la pierna, y se eliminaron los repintes. Fue necesario dar una capa de preparación en el manto de la Virgen por la parte posterior ya que ahí estaba la madera del soporte al descubierto. Finalmente se reintegró la policromía de esta zona y se dio un barnizado final de protección.

Crucificado XVII

La talla presentaba abiertas las uniones de los brazos al torso, desgastada la policromía de los dedos de los pies por los roces y besos de los fieles.

Se masillaron las uniones de los brazos, se colocó una espiga en el torso por detrás, para que todo el peso de la obra no descanse sólo en los brazos y pies.

Se eliminó el barniz oxidado de la policromía original. Reintegrar las capas de preparación y pictórica en los dedos de los pies y se dio un barnizado final de protección.

Cristo de Los Laureles XVI

La talla presentaba abiertas las uniones de los brazos al torso, desgastada la policromía de los dedos de los pies por los roces y besos de los fieles. Presentaba ataque activo de xilófagos, carcoma, y faltaba bastante policromía original.

Se masillaron las uniones de los brazos, se colocó una espiga en el torso por detrás, para que todo el peso de la obra no descanse sólo en los brazos y pies.

Se eliminó el barniz oxidado de la policromía original. Reintegrar las capas de preparación y pictórica en los dedos de los pies y de numerosas lagunas repartidas por todo el cuerpo. Se dio un barnizado final de protección.

Sepulcro XVIII

Llegó completamente repintado en tonos ocres y negro, que respectivamente cubrían marmolado en tonos siena y molduras en pan de oro. Además de presentar ataque activo de xilófagos, carcoma.

Se eliminó todo el repinte, limpió de barniz oxidado la policromía original, aplico producto para acabar con la carcoma y se dio un barnizado final de protección.